Presentación

La primera vez que desperté mis sentidos a la llamada del carnaval fué allá por los años setenta trás leer un articulo, virtuoso y a manera de ensayo, de nuestro ilustre paisano Juan Antonio Guzmán Camacho.

Pude advertir entre sus lineas alguna que otra conjetura y mucha sagacidad. Era un artículo erudito y nada extempóreo, sin embargo me llamó la atención por la sublime ambiguedad que desprendían sus remoquetes.

Aquella colaboración fué publicada en Huelva por la Revista de cultura popular CANDIL, tristemente desaparecida como tantos otros medios de comunicación, donde practicaba mis artes gráficas como maquetista e ilustrador, abriéndome las puertas del mundillo periodístico y que hasta la fecha me alimenta y congratula.

Ya embelesado por las fantasias del carnaval, no pude cejar en mi empeño de abundar sobre las fiestas carnestolendas e implicarme hasta los tuétanos, para disfrutarla y difundirla.

Dan fé de todos mis pasos, las columnas y otras colaboraciones que firmé para los diarios Huelva Información, ABC, La Higuerita, El Correo de Andalucía, Diario 16, La Noticia, La Prensa, La Voz de Huelva, Odiel Información y El Mundo-Huelva Noticias. También fueron plataformas de sabiduría y regocijo los trabajos realizados durante más de quince años para Radio Juventud de Huelva, posteriormente reconvertida en Nacional de España, Onda Cero, Radio Popular, Cadena Ser y Canal Sur Radio.

En el año 1986 traje a la luz del mundo, por empeño y necesidad una publicación, pionera en su género, denominada REVISTA DE CARNAVAL y cuya cabecera le sirvió a mi buen amigo y sabio carnavalero José Luis Camacho Malo para editar un cuadernillo central en Huelva Información, con formato muy parecido y desde donde catapultó a la fama nuestro actual Carnaval Colombino. La Revista se publicó durante cuatro años seguidos y a pesar del gran esfuerzo personal que supuso mantenerla viva, le pudieron las fuerzas ignominiosas de sus detractores, dando con sus hojas y sus verdades en lo más recóndito de la historia negra de nuestro carnaval.

Hoy, un poco apartado de la competición, perdura en mí aquel espíritu de honradez y franqueza para defender y fomentar las virtudes de mi tierra, por encima de intereses partidistas, oligárquicos o de cualquier otro signo, lo cuál me acarreó más de un disguto y disputas. Todo lo tengo por orgullo pues siempre mantuve alerta el sentido de libertad y respeto hacia los demás, sin vencer las fuerzas ante el egoismo, la necedad o la hipocresía.

En éste sentido pongo todo mi esfuerzo para seguir, desde ésta humilde pero recia atalaya, defendiendo y promocionando el Carnaval de Huelva como siempre lo he hecho, con mis mejores armas como son las letras, las ideas y mi disposición artística para todo aquel que la necesite.

Os invito a que me acompañeis en ésta nueva singladura, pues como siempre digo, necesito oidos que me escuchen y ojos que me vean o por el contrario, estaré perdido en la soledad de los idiotas. Bienvenidos, amigos.